La Ceremonia de Oler

Oler es una ceremonia. Es un acto de conexión con nuestro sentido más ancestral, el olfato, embarcándonos a un viaje de profundidad, silencio y resonancia que nos otorga cada aroma en particular. 


Cuando estamos frente a una planta, ingresamos en su campo vibracional, y en unos instantes, podemos percibir un cambio en nuestra freciencia energética, una frase o palabra que se presenta, un recuerdo, una emoción, una persona, un viaje adentro de nuestra memoria que vuelve a invitarnos a vivirlo. 


Oler es una ceremonia. Cada molécula aromatica que contiene un aceite esencial esta llena de personalidad, de concentración, de medicina e invitación. Olemos y registramos inmediatamente si nos gusta o no. Olemos y registramos cómo se siente: liviano, pesado, concentrado, suave...Olemos y nos sentimos más atentos, más armoniosos, más vivos, más sensibles...


Oler es una ceremonia que nos invita a ir a nuestra propia profundidad.

Las plantas con sus aromas medicinales nos preparan para "ese viaje". Son los pilotos de ese vuelo, que no sabemos a dónde nos llevará, pero que seguro, al terminar ese viaje, no seremos los mismos.


Oler es una ceremonia, un llamado que nos conecta con rituales ancestrales donde plantas, humanos, animales y naturaleza eran uno. Para los antiguos, cada parte de la naturaleza era sagrada, como nosotros mismos, y cuando se perdía esta conexión con lo sagrado, pues también se perdía la conexión con nuestra salud.


Oler es una ceremonia, un canto y sonido que nos convoca a despertar del sueño de lo conocido, de lo anestésico, para conectar con lo esencial, visible, tocable que habita en este mundo y este tiempo. 


Oler es una ceremonia, que involucra cerrar los ojos, respirar y sentir la vida a través de los mensajes de la naturaleza y nuestra conexión profunda con ella. Una planta con su aroma puede ofrecernos el boleto de regreso a nosotros mismos. La naturaleza puede ser la aliada como camino a la salud integral y recobrar nuestros origenes, nuestra identidad.


Oler es una ceremonia que nos enciende, que nos salpica, que nos mueve, que nos enseña, que nos emociona, que nos ensueña, que nos sacude, que nos trae, que nos lleva, que nos nutre, que nos avisa que estamos aquí y ahora... todavía, todavía

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